De una a tres veces por semana, según las recomendaciones de su especialista del cuidado de la piel
Limpiar bien la piel con un limpiador Clayton Shagal
Humedecer ligeramente la piel
Aplicar el Exfoliante de Salvado de Avena en el rostro y el cuello (evítese el contorno de los ojos)
Dejar actuar entre 3 y 5 minutos
Con las yemas de los dedos humedecidas, emulsionar ligeramente realizando movimientos circulares suaves
Aclarar con abundante agua tibia
Limpiar con cuidado el rostro y el cuello una vez más con un limpiador Clayton Shagal
Utilizar una mascarilla Clayton Shagal o
Aplicar el concentrado y/o gel Clayton Shagal
Para terminar, aplicar una crema hidratante Clayton Shagal
Si su piel es sensible o propensa a la cuperosis, limite el uso a una vez por semana sin emulsionar.
Para conseguir una limpieza en profundidad: utilícelo en la ducha porque el vapor liberará el salvado de avena, permitiendo que se filtre en los poros.